¡Cuántas chicas y chicos nos llaman contándonos los malos momentos que pasan en sus cuadrillas!
Malentendidos, culebrones, que si uno o una no va a una cita con el resto, las peculiaridades de cada una y cada uno que tienen que encajar con los de los demás… Todo esto hace que muchos adolescentes se coman la cabeza y no saben muy bien qué hacer.
Como acostumbramos, nuestro consejo para ellos y ellas es, casi siempre, el mismo: HABLADLO. Sois amigas, amigos y aunque esto es una categoría, digamos, voluble, cambiante, flexible, otorga la confianza para poder hablar las cosas.
No decimos que haya que hacerlo con toda la cuadrilla a la vez y seguro que siempre se tiene a un amigo o una amiga con quien se tiene más intimidad, más enganche, etc.
Resolver malentendidos o crear otros más grandes, reír o llorar… Sea para lo que sea, es preferible resolver la incertidumbre o las dudas que uno tiene en su cabeza y se calla hablándolo con las y los demás, que seguirle dándole vueltas a algo sin saber muy bien a qué.