– «Tú no tienes la culpa de que tu ama y tu aita se separen. Has de tenerlo claro«.
Esta es una de las coletillas clásicas de nuestro servicio que, no por más utilizada, sigue teniendo toda la razón del mundo. Y es que son muchas las llamadas de chicos y chicas al número 116.111, al teléfono de Zeuk Esan, en las que ellas y ellos se autoinculpan del proceso de separación o divorcio que en esos momentos pueden estar viviendo sus padres.
Entendemos que es o puede ser una reacción medianamente normal o, cuando menos, muy habitual entre los hijos e hijas que viven este tipo de situaciones, sobre todo cuando todavía no son muy mayores. En ese caso, lo dicho: nos toca advertirles de que una separación o un divorcio es una decisión tomada por personas adultas y las razones siempre tienen que ver con cosas de personas adultas.
En este sentido, nunca está de más que las propias madres y padres, nos echen un cable, es decir, que ellas y ellos expliquen a sus hijos e hijas precisamente éso: que les digan que es una decisión en la que los menores no tienen la culpa y que no han de echarse nada sobre su espalda al respecto.
Con todo, nosotras y nosotros seguiremos insistiendo en esta línea cada vez que una niña, un niño o adolescente nos plantee que se siente culpable por la separación de sus padres. NO. TÚ NO TIENES LA CULPA.